3. Después: ¿qué hago con la información?

3.1. ¿Cómo almaceno la información obtenida?

Cada proceso de localización de información implica una acumulación de habilidades que el usuario incorpora para diseñar estrategias cada vez más eficientes de búsqueda, y le aporta nueva información sobre los instrumentos y las técnicas para buscar y validar los contenidos encontrados. Se trata de un proceso de capacitación progresiva que se puede apoyar con el uso de herramientas de almacenamiento y organización de la información para localizarla posteriormente.

Estos procesos de búsqueda generan la localización de un número más o menos grande de fuentes informativas de interés que conviene ordenar y clasificar para un uso inmediato o futuro.

A la hora de archivar estas fuentes electrónicas de información, podemos elegir entre varias fórmulas de efectividad variable y que no son excluyentes, de modo que lo más eficiente puede ser combinarlas en la medida en que se adapten más y mejor a las necesidades de cada usuario en cada momento.

En el recurso «Pautas para optimizar la organización de la información digital», se encuentran definidas, entre otras, las siguientes estrategias, con las herramientas y recomendaciones de uso para almacenar la información de forma sencilla y ordenada, seleccionada en los diferentes procesos de búsqueda:

  • Marcadores del navegador.
  • Marcadores en línea (sociales).
  • Notas personales.
  • Sindicación de contenidos (RSS).

La automatización de procesos de almacenamiento facilita las gestiones a la hora de utilizar diferentes herramientas combinadas. Se pueden programar diferentes acciones, como guardar los marcadores del navegador en un espacio en la nube sin hacerlo de forma manual.

Este punto se encuentra detallado en el apartado «Automatización en la gestión de la información», en el recurso «Pautas para optimizar la organización de la información digital».